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lunes, 3 de octubre de 2011

Fragancias

El aroma de una persona puede llegar a constituir una seña de identidad tan reconocible que uno pueda cifrar en ella toda una relación amorosa.

10 comentarios:

  1. Nenuco o BLV II de Bulgary


    Marikosan

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  2. Buen ejemplo de ello es la novela El perfume.

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  3. Pero entonces puede resultar muy engañoso, ¿no?

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  4. Querida Jana, amar y tener juicio apenas si está concedido por los dioses.

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  5. Que curioso Marikosan: Bvlgari pour homme Extréme.

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  6. Tengo que confesar que la novela de Süskind me impactó muy positivamente.

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  7. yo tengo fijaciones fortísimas con los aromas, cada perfume que usé en determinada etapa de mi vida se quedó grabada con el recuerdo de la persona que estaba a mi lado en ese tiempo, de modo que cuando vuelvo a esos aromas es inevitable recorda a ese alguien... qué intesidad no?

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  8. Así es como ocurre, es la magdalena de Proust. También con los besos, un día hablaremos de los besos.

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  9. Curiosamente los aromas también fomentan la misantropía. Al menos en el autobús, sobre todo en verano, a mi me pasa.

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  10. El aroma dice mucho de una persona, además activa la química entre dos personas que se gustan.

    Un abrazo perfumado, Pitt!

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