Varios amigos en sus blogs andan a revueltas con los problemas cotidianos ("lunes" de alucina pepinillos); con los problemas económicos ("¡Hasta los pepinos!" de Yolanda Quiralte); o sociopolíticos ("Indignados" del Diario de un completo gilipollas)
Lo cierto es que la vida es dura y peligrosa: que aquel que persigue su propia felicidad, no la alcanza; que el débil ha de sufrir; que quien solicita amor se verá decepcionado; que el glotón no quedará saciado; que quien busca la paz, encuentra guerra; que la verdad es solo para los valerosos; que la dicha es solo para aquel que no teme la soledad; que la vida es solo para aquel que no teme a la muerte.
Breves apuntes sobre cultura y pasión taurina
Jajaja el lunes no es un día problemático para mi, sólo los domingos :D
ResponderEliminar"La vida es sólo para aquel que no teme a la muerte"... eso me gusta. La ley de las contradicciones.
ResponderEliminarComo decía Jardiel Poncela: la vida es tan amarga que abre a diario las ganas de comer.
Besos desde Villafranca, con una tormenta seca de esas que te dan ganas de meterte debajo de la mesa.
Ana Pepinillo ¡no vayas a Alemania!
ResponderEliminarJana, las tormentas tienen su encanto.
¿Para qué temer a la muerte? Seguro que es más penoso asumirla que padecerla. Jardiel era un monstruo.
La vida es una tómbola, tom-tom tómbola, de luz y de coloooooor, de luz y de colooooooor, etc.
ResponderEliminarCompletamente de acuerdo con la última frase.
ResponderEliminarUf, es que el tema de los pepinos se las trae. En fin, que lo importante es disfrutar, ser feliz y querernos mucho unos a otros (esto último sobre todo...)
ResponderEliminarBesis
Querido Pitt, yo estoy en uno de esos días en que prefiero quedarme con el modelo de Pepe, tómbola, tom, tom, tómbola....
ResponderEliminarabrazos bien fuertes para todos
Como decía el personaje "Rocky Balboa" en su última película: "Nadie golpea más fuerte que la vida".
ResponderEliminarPorque no todo es "alegría y color".
En verdad puede ser terrible y por más duro que uno sea, la vida puede arrodillarte a golpes y tenerlo a uno sometido permamente si no se lo impides.
Sí, nadie golpea más fuerte que la vida...
"Pero no importa lo fuerte que golpeas, sino lo fuerte que pueden golpearte".
"Pero aguantas los golpes mientras avanzas".
"¡Hay que soportar sin dejar de avanzar!"
Si queremos seguir adelante, si queremos ganar, hay se seguir adelante y conseguirlo, pero habrá que seguir aguantando los golpes de la vida.
Y no se puede decir que uno no está donde uno quería estar, por culpa de fulano o sultano.
"Echarle la culpa a los demás solo lo hacen los cobardes y ¡tú no lo eres!"