Decía Palacio Valdés que no hay nada más triste que la tristeza de un hombre alegre.
Por encontrarnos en el mundo, nos cubre una llama que da pavor. Soy de pies a cabeza la gran vacilación del hombre. Mustio, trago a cántaros el olvido y la tiniebla.
Hay días grises que te muerden el alma, en que tengo la sensación de que el final empezó hace tiempo. Y perdonad la tristeza que diría Vallejo, y a vivir, que son cuatro días.
Es verdad lo que dices un amigo mío,le pasa eso: mira que es alegre, pero cuando entra en estado catatónico... no hay quien lo suba p'arriba.
ResponderEliminarJoder, Tracy, es que me ha dado una tristeza, de repente, como un estallido, cuando he leído algo y lo he casado con otra cosa, como cuando unes dos piezas de un puzzle imposible.
EliminarComo hoy va de tristeza no te voy a decir lo que me la sube p'arriba.
Hala, hala, vosotras, las jovencitas, a divertiros.
Gracias.
Aquí llegamos las tres en operación rescate. A veces el cuerpo necesita melancolía y cuanto más alegre eres, más fuertes son esos momentos. A mí también me suele pasar, y si te sirve de algo creo que la tristeza, la melancolía y hasta a veces el odio necesitan su momento, no hay que hundirse, tampoco rechazarlos, simplemente tienen que fluir, es necesario Pitt, no existe la alegría absoluta. Piensa que tal como vienen se van. Aprendí a manejar la melancolía hace tiempo y a mí me gustan esos momentos. Y cuando estoy así me encanta pasear sola y hacer fotos. HAZ FOTOS PITT, TE SALDRÁN HERMOSAS Y ADEMÁS QUIERO VERLAS.
ResponderEliminarUn beso grande
Recibiendo este consuelo estaré triste más veces.
EliminarUn beso.
Es que si subes mucho con esa de la alegría más dura es luego la caída. Qué agobio con la ley de las compensaciones.
ResponderEliminarEso, eso. Y el Boyle, y el Mariotte, ¡menudos cabrones!
EliminarPues no sé, a mí me dan más pena los tristes tristes.
ResponderEliminarY los tres tristes tigres.
EliminarAy como te entiendo Pitt, yo que soy una mujer alegre cuando me dan esos brotes melancólicos me pongo hundida. Pero precisamente porque somos alegres y estamos como cabras solemos recuperarnos rápido, yo de otra manera que tú pero a fin de cuentas el final es el mismo.
ResponderEliminarBesos alegres!!
De acuerdo con eso de que estoy como una cabra. Capricornio nada menos.
EliminarBesos y alegría juncal.
Qué está pasando con la tristeza? Nos está invadiendo a todos?
ResponderEliminarTienes razón, parece una epidemia pero, a fuer de sinceros, para todo tenemos.
EliminarBesos.
Ayyyyy, bendita tristeza y bendita melancolía, que nos permiten valorar más la alegría y la felicidad.
ResponderEliminarBesos.
Por algo decía Benedetti: Nunca pensé que en la felicidad hubiera tanta tristeza.
EliminarBesos.
"y a vivir, que son cuatro días" y algunos nublados.
ResponderEliminarClaro que quizá aquí viene mejor: y dos son de resaca.
Añoro los años de resacas, al menos estaba la mitad del tiempo contento.
Eliminar:P
Quizás no venga al caso,Pitt. Al igual que el más tímido de los hombres,acaba siendo en ocasiones el más imprudente, el alegre se puede convertir en el más triste, " son los contrastes del ser humano ", todo pasa pitt.
ResponderEliminarGracias y saludos.
Si viene al caso y todo lo que dices en tu comentario es bien cierto.
EliminarUn abrazo, querido David.
Todos estamos sujetos a la tristeza porque somos exageradamente depresivos y melancólicos.
ResponderEliminarY no estoy diciendo que la tristeza sea "mala". Nada de eso.
La tristeza trae recogimiento y un mirar hacia adentro.
Besos Pitt.
Es una certera afirmación. Y la agradezco más si cabe porque viene de tu persona, ¿ya habéis leído el blog de Aniquiladora? Ella es una auténtica escritora. Muchas gracias por dedicarme esta parte de tu tiempo.
EliminarBesos.
¡Ánimo!
ResponderEliminarLa alegría y la tristeza son como las diferentes estaciones de nuestro ánimo, como dice Khalil Gibran. Por otra parte, puede ser muy dañino quedarnos pegados en la tristeza. Quisiera decirte: "¡Sonríe que Jesús te ama!" y no sé si puede llegarte aunque no lo creas. En el Eclesiástico o Sirácides, se dice: "Arroja la tristeza de tu corazón." y algo así como "porque una vida de tristeza es dañina para el corazón". De mi parte quiero decirte, algo familiar para mí desde niña, sin saber de donde viene: "Sursum corda". La esperanza nunca muere. Por ejemplo, un asunto diferente es la recuperación de mi hijo mayor que es lenta pero sigue con algún movimiento nuevo o dos, cada día, será tarea larga y es complementaria, volver a desarrollar los músculos. Dentro de todo, es un alivio que el síndrome que le ocurrió ataca el sistema nervioso periférico y no el central, que está mucho mejor que lo que estuvo, que empezó a tener tratamiento ad hoc, en una etapa menos avanzada del daño que otros pacientes que se recuperaron, está rodeado de personas que le dicen que forman un equipo en conjunto con el paciente y actúan en consecuencia, exhortándolo a avanzar lentamente; por otro lado, los internos de medicina hacen cola para conversar con él y eso le ameniza el transcurso del tiempo; lo encomiendo a Dios y también lo hacen por diversos medios o madalidades, personas relacionadas conmigo; y ahora, incluso el prsonal de aseo de la clínica, le ha dicho que lo ha encomendado en su modalidad. Un médico mayor que trabaja tanto unas horas ahí y otras con el menor de mis hijos, en otro lugar, se preocupa de revisar si los cambios de medicamentos que le prescriben quienes son menos experimentados que él, le parecen adecuados. En fin, hay que tener mucha paciencia y hay mucha esperanza.
Un cariñoso saludo.
Gracias, creo que era Khalil Gibran también el que decía que tanto aquello que nos alegra como lo que nos entristece bebe del mismo pozo. Y es una gran reflexión.
EliminarUn cariñoso saludo y siempre esperando que los problemas de salud mejoren.
No hay tristeza en hombre alegre, sólo un mal día, y eso lo tiene cualquiera. ¿Qué opinas de Manolo García? Ahí lo llevas:http://www.youtube.com/watch?v=fBgT9BDX_tE
ResponderEliminarNada puede hacer que se vaya la alegría o se pierda la sonrisa, si lo consigue, no merece la pena.
Besotes
Eres ecantadora. Bueno Manolo García, toda una referencia generacional, probaré a se una nube...
EliminarBesotes.
Es cierta esa frase, sobre todo porque los días tristes, o nublados como dice Detalles, de esos hombres, suelen ser mucho más turbulentos que los del resto.
ResponderEliminarEn cualquier cas, como alegres que son, a pasar ese nubarrón y después a vivir, que vivir no es sólo un infinitivo.
Me ha encantado eso tan filólogo de "que vivir no es sólo un infinitivo".
EliminarBravo, y gracias.
Es cierto que se puede caer en la melancolía, y pasar de la mayor alegría a la tristeza más profunda. Pero lo bueno que tiene el ser humano es la capacidad de recuperación, de levantarse, mirar hacía delante y recobrar, sino del todo, al menos poco a poco la alegría.
ResponderEliminarY estoy de acuerdo con el comentario de Conchy P.Vázquez blogpasionporlavida@gmail.com, que la tristeza nos ayuda a valorar la alegría.
Creo que en los momentos tristes, el recuerdo de los momentos felices nos ayuda a sonreír.
La melancolía y la felicidad forma parte de nosotros, porque la vida sin contrastes, sin opuestos, no sería vida.
Un beso.
Asi es la vida. Incertidumbre, alegría y desasosiego.
EliminarUn beso.
Esa foto está llena de melancolía, habla de todo aquello que el tiempo desvanece... Pero, como tú dices ¡a vivir, que son 2 días! Bss
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