A la entrada de ayer comentaba Judd "nunca llegaremos a entender la complejidad del ser humano" y tiene mucha razón.
El modo exacto como las reacciones químicas y las señales eléctricas que se producen cada segundo en el cuerpo humano se convierten en ideas, motivaciones o impulsos -allí donde la maquinaria física del hombre se detiene y aparece el fantasma de la máquina, la consciencia- en realidad no es un tema científico, por la sencilla razón de que no podemos diseñar un experimento para captarlo, medirlo o reproducirlo. Pese a todo lo que hemos aprendido, el hecho sigue siendo que no entendemos de forma coherente por qué la gente hace lo que hace, y probablemente nunca lo entenderemos.
Breves apuntes sobre cultura y pasión taurina
Y aunque en principio sea tentadora la idea de entenderlo, aún en el supuesto de poder comprenderlo, creo que sería mejor no hacerlo. Así tengo la fantasía de ser diferente de una máquina.
ResponderEliminarImprevisibles por diferentes. Encuentro tanta diferencia entre yo y yo mismo como entre yo y los demás. Máquinas incluídas.
EliminarAunque me parece que tú eres una "máquina", en el mejor sentido.
Afortunadamente somos seres muy complejos,muchísimo más que las maquinas. ¿ No piensas que en la complejidad del ser humano radica su grandeza y su riqueza ?.
ResponderEliminarQuizás nunca llegue a a comprender a los demás aunque siga creyendo en las personas. !! qué ingenuo !! ¿ no ?
Gracias, Pitt.
Personalmente sólo creo en las personas anormales. Anormal. Que no responde a la norma. En cuestiones de pensamiento y conducta ser independiente es ser anormal.
EliminarGracias siempre a tí, por tus aportaciones.
Somos muy complejos pero a veces la belleza está en la sencillez, esa que barre todas las complicadas excusas con un gesto, con una sonrisa, con un desnudo, con un beso.
ResponderEliminarBesos.
¡Mis tres musas: Eau, Euria, Idoia!
EliminarYo soy sencillo... con un desnudo, con un beso...
Pues eso, beso.
Ayer se lo decía a una amiga..."pero mira que son complejos los tíos eh????" jaajjjajaja.(es coña....) creo que el ser complejo es intrínseco en algunos sujetos...con lo fáciles que son las cosas!!!!!!!!!!
ResponderEliminarbsssssssssssssssssssssssssssssssssss pío pío-
Me lo decía mi abuelita
Eliminarme lo decía mi mamá
me lo dijeron muchas veces
se me olvidaba muchás más...
Pío, pío (qué bien se está en una jaula, según dónde esté ubicada, siempre es un problema de ubicación)
Besos.
¿Y si el secreto no está en entender sino en aceptar y respetar?
ResponderEliminarLa bondad es el principio del tacto, y el respeto por los otros es la primera condición para saber vivir.
EliminarDe acuerdo contigo. Pero no me respetéis tanto que os impida besarme (en general)
El hombre propone y Dios dispone, por eso no nos entendemos ni nosotros mismos, y esto lo he escrito despues de dos días pensando que contestarte.
ResponderEliminarUn abrazo
Estamos ante una sentencia que leemos en la Imitación de Cristo: Homo proponit, sed Deus disponit (1. 19. 9.). Esta paremia recuerda la sentencia bíblica Cor hominis disponit viam suam, sed Domini est dirigere gressus eius [El hombre dispone su camino, pero al Señor corresponde disponer sus pasos] (Proverbios 16, 9)
ResponderEliminarA mí me ha costado menos responderte, traviesa Ester.
Un abrazo.
A veces creo que ya lo sé todo de mi y un día me llevo una sorpresa (que igual no me gusta y me desconcierta) Si no me entiendo yo... O tal vez sea más fácil entender a otros que entenderse a uno mismo. La verdad, no lo entiendo.
ResponderEliminarSaludos.
Te ocurre porque buscas, porque eres inquieta e inteligente, nunca nos conocemos bien a nosotros mismos ni a los demás.
EliminarGracias por venir a este lugar, para que vayas sabiendo algo te adelanto que en este blog no aprenderás nada útil. Tiene su lógica, es lo que ocurre suele ocurrir cuando su autor es un inútil.
Saludos.
Buscar, busco, pero no creo ser inteligente, como no creo que el autor de este blog sea un inútil. Lo de aprender algo útil... de las cosas inútiles también se aprende.
EliminarSaludos.
Soy muy permeable a los halagos así que ya me caes fenomenal. Si crees que se aprende de las chorradas estás en el sitio adecuado.
EliminarDéjate de protocolos. Besazo Nena Kosta.
Fíjate que yo con entenderme a mí misma, ya me daba con un canto en los dientes...
ResponderEliminarBesos, Pitt
Querida Belén y eso que tú eres mente "alto standing". Imaginate la mayoría de los mortales.
EliminarBesos.
Es cierto que no entendemos nuestra complejidad, pero ahí radica la magia, en no saber, en tener la capacidad de sorprendernos y de aprender día a día. Es lo que nos diferencia de las máquinas y lo que hace que estemos vivos, el no saber, en el fondo, nada.
ResponderEliminarY, sobre todo, ser imprevisibles. Miseria y grandeza como las dos caras de una moneda.
ResponderEliminarEso pienso, que nunca sabremos por qué hacemos algunas cosas y por qué dejamos de hacer las mismas según qué ocasiones, o porque nos quedamos quietos sin hacer nada, los seres humanos somos abosolutamente complejos y esto no hay quien lo arregle, tal vez en eso consiste la curiosidad por la vida.
ResponderEliminarBesicos.
La verdad es que si un hombre no tiene costumbre de preguntar, de preguntarse, nadie puede hacer nada por él.
EliminarGracias por el comentario y la visita.
Besos.
Me gusta ir conociéndome poco a poco y llegar en algunos momentos a entender que es tan lento el proceso que no se si acabaré (que mejor que no acabe). Conocer a otros/as en ocasiones puede resultar más sencillo, aunque esa aparente sencillez no es más que el fruto de la prepotencia. El desconocimiento es maravilloso, porque si te inquieta es lo que te mueve.
ResponderEliminarBeso.
Es profundo lo que dices, fíjate en su similitud con algo que expresaba Elías Canetti: "...un conocimiento que no nos de tregua, que nos acose siempre. Es mortal un conocimiento que nos vaya aplacando".
EliminarBravo, amiga.
Beso.
Cierto.
ResponderEliminarNi yo misma puedo entenderme a veces,me resulto un misterio,así que,cómo entender al resto?
Somos un misterio desde que se nos concibe hasta que desaparecemos.
Amén.
:)
Besos.
¡El misterio! Sí, un misterio profundo nos envuelve. Cuanta más luz, más misterio.
Eliminar¡Amén Jesús!
Besos.
Bueno yo soy la menos indicada para hablar de "entendimientos" hay tantas cosas que no entiendo que ya han dejado de preocuparme. Otras sin embargo las entiendo perfectamente, pero tampoco me preocupan mucho. Lo que nunca llegaré a entender de ninguna manera por más que lo he intentado es a las mujeres jajajaja.
ResponderEliminarBuenos días.
La mujer, querida Maite, alberga el misterio más inextricable que existe, pero eso es tan extenso que es imposible resumir.
EliminarUna curiosidad sobre lo que dices es que las mujeres pueden perdonar todo excepto su cara.
Besos y buenas tardes.
Todo es pura química.
ResponderEliminarTal vez deberíamos asumir que no podemos tener respuesta a todo...
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