martes, 22 de octubre de 2013

Los "otros" son los feos



Ampliando el pasado post, seguimos con el tema.
¿Dónde radica la esencia de lo feo? Esta pregunta sólo se puede contestar de manera individual, aunque los cánones que rigen lo horrible se establezcan de manera colectiva. Feo es aquello que quiere imponerse como tal. Así, ni por derecho ni por justicia, pero con una escandalosa ventaja, el premio a la fealdad lo han ganado tradicionalmente las mujeres, los judíos, los negros, los pobres... Los símbolos de otras religiones, los correspondientes a otras culturas, los enemigos políticos...
Pero con la modernidad esto comenzó a cambiar. Los feos infelices -Frankenstein, Quasimodo, Rigoletto...- crean una enorme brecha en la tradición, y la deformidad física y moral se separan inevitablemente. Los enfermos comienzan a verse de manera diferente, lejos del desprecio y el horror de años anteriores. Las vanguardias convierten lo feo en triunfo. Futuristas, expresionistas alemanes, cubistas, dadaístas, surrealistas preconizan la fealdad. Y se entra en los tiempos en que la belleza y fealdad no se limitan a una única percepción. Hay gustos para clases altas y para clases bajas, para cultos y para incultos; se cuestionan las preferencias de los demás; surgen lo kitsch o lo camp; los objetos se vuelven "bellos porque son feos"...
Pasen y vean, están ustedes en la parada de los monstruos: "Ellos no pidieron venir al mundo, pero al mundo vinieron. Su código de conducta es su ley. Ofende a uno, y ofenderás a todos". ¿Y quién no es, para algún otro, un monstruo repulsivamente feo?

(Para el que tenga curiosidad, en la foto Pitt Tristán con una de las seguidoras del blog, que es muy maja y cariñosa)

30 comentarios:

  1. Por qué me da que esa foto no es tuya, o qué? xd! Quién es Rigoletto, a ese no lo conozco (seguro que esto es muy mal por mi parte). En cuanto al resto, totalmente de acuerdo, quizás matizar que ahora lo feo es bello porque lo que se busca es lo que se sale de lo común. Biquiños!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Seguro que te suena la ópera de Verdi del mismo nombre y también habrás escuchado una de sus más famosas arias: La donna è mobile.
      ¿Ves como lo conocías? A esto se llama método socrático, jajajajajajaja.
      Besos.

      Eliminar
  2. Y seguimos igual. Desde siempre la fealdad se ha castigado con dureza y si te das cuenta, ahora mismo pasa igual siguiendo los cánones de belleza de hoy en día.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No creas, algo ha cambiado. Hace años cualquier criatura con deformidades severas, físicas o mentales, eran recluidos por sus propias familias dentro de las casas, hoy son en muchos casos ejemplos de belleza en campos tanto del arte como de la ciencia. A eso me refería. Aunque, seamos sinceros, como digo en otro orden de cosas: más vale ser rico y tener salud que ser pobre y estar enfermo.

      Eliminar
    2. Bueno, ahora las deformaciones son a nivel mental y lo llevan al circo de Telecinco...jaja

      Eliminar
    3. ¿Así le llaman ahora al Parlamento?

      Eliminar
  3. Normalmente si encuentro a una mujer muy obsesionada con la belleza o fealdad de los otros la descarto como posible pareja. Con ella no pasaré de la superficie y a mí es la parte que menos me interesa. Ojo que para el sexo no descarto a nadie pero luego que no esperen mi llamada.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Siempre aprendo con vosotros, y contigo ni te cuento, pero como soy lento de entendederas hoy sólo me dedicaré a unas pocas palabras de este comentario: "para el sexo no descarto a nadie".
      Siempre está bien aprender de los maestros de algo.

      Eliminar
  4. Entonces Barceló y Tapies son creadores de belleza. Me quedo en el pasado mucho mas objetivo.
    La foto es estupenda los dos estáis muy favorecidos.
    Un abrazo, bueno uno para cada uno

    ResponderEliminar
  5. Entonces Barceló y Tapies son creadores de belleza. Me quedo en el pasado mucho mas objetivo.
    La foto es estupenda los dos estáis muy favorecidos.
    Un abrazo, bueno uno para cada uno

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Respetable el gusto personal; Barceló y Tapies son dos indudables genios.
      Gracias por enviarnos también un comentario para cada uno, todo un detalle. Jajajajaja.
      Abrazos.

      Eliminar
    2. Ha debido ser por los nervios de comentar en un blog con tanto carisma. Perdón

      Eliminar
  6. Qué Pitt, qué Pitt tan tiernecito sós! jeje
    Se te entiende muy bien lo que tratas de decir, pero sigo diciendo que nada hay cierto al cien por cien.
    Bicos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Estoy de acuerdo en lo de las certezas, alguna vez ya lo he comentado, vivir en la duda permanente, como es mi caso, puede resultar molesto pero vivir en la certeza es absurdo.
      Meno mal que has descubierto al verdadero Pitt, ese ser sensible escondido tras la máscara de la misantropía, tierno como un corderito, suave como un vilano.
      Bicos.

      Eliminar
  7. Eras guapísimo de pequeño y cariñoso, me imagino que con lo cuidado que estabas, lo seguirás siendo también ahora.

    ResponderEliminar
  8. La belleza una moda totalmente variable...
    Cuando vemos a las personas, hablamos de belleza externa, pero cuando "conocemos" vemos la belleza como la suma interno+exterior... feo y guapo adquiere nuevas dimensiones.
    Pero mira que monín y tierno eres jajajaja
    Besos ;)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es la foto de mi interior.
      Lo que más me extraña es que parezca sorprender que sea tierno...y monín.(?)
      Besos.

      Eliminar
  9. Según Wilde, dependiendo de la luz, posición y lugar en el espacio, todo lo bello puede ser feo y viceversa.
    Más o menos eso dijo y yo estoy completamente de acuerdo con él.
    La fealdad es, casi diría intrínseco en el ser humano y al reflejarse en el rostro, en los hechos o ademanes, la percibe el resto, peroooo...
    No siempre es de horrible apariencia...
    Estás monísimo al brazo de esa comentarista.
    :)
    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Esto empezó con una apreciación hedonista de la belleza que existe a nuestro alrededor y de la fealdad que es algo así como su vulgarización, pero llega Marinel y nos nombra a Oscar Wilde y, como inteligente que es, da en el clavo porque precisamente una de sus obras más conocidas "El retrato de Dorian Gray" no es otra cosa que un estudio sobre la trascendencia de lo bello; y con esto consigue Marinel complicar los dos post o, mejor dicho, enlazarlos y tener un tema abierto para horas, días, lustros de discusión y análisis: detrás de todas las cosas exquisitas que existen hay algo trágico (esa podría ser una frase para otro post de continuación).
      Gracias Marinel, tú si que eres una comentarista monísima.
      Besos.

      Eliminar
  10. Jajajajajajajja me parto con la foto...
    Respecto al tema en cuestión pues qué decir que no hayan dicho ya. La fealdad es relativa como la belleza, según con los ojos que se mira, la objetividad de cada uno o el concepto mismo de ambas cosas. Pero lo que sí es obvio que la belleza radica en la simetría, todo lo que se salga de lo simétrico ya es raro, pero eso no quiere decir que no sea hermoso. Como las obras de mi Gaudí... que de simétricas ya ves tú, sin embargo son auténticas maravillas. Si nos pasamos a las personas pues hay hombre feos y muy atractivos y hombres bellos más atractivos todavía!! y con las mujeres igual. Pero lo que es de sentido común, es que te puede parecer alguien más o menos bello, pero generalmente casi todos coincidimos en lo que es feo o no. Menudo tocho te he soltao... ufff...
    Besos!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, la belleza también es relativa y abstracta y lo que se considera bello en un determinado momento puede que no lo sea en otro contexto. La verdad es que es un asunto en el que se puede profundizar cuanto se quiera.
      No es un tocho, agradezco y valoro mucho tus palabras. Gracias.
      Besos.

      Eliminar
  11. Ya! Luego lo que ocurre es que lo que empieza siendo hasta una buena idea, no despreciar lo feo, normalizarlo, termina saliéndose de madre y convirtiéndose en exaltación de la fealdad, y ser feo es lo superguay y nos vamos al otro extremo, ni una cosa ni la otra, ni obsesionarse con la belleza ni rechazarla como signo de frivolidad o por snobismo, que de todo se ve en este mundo.
    Besos Pitt

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo creo que la palabra más acertada es esa que empleas de "normalización" y también estoy de acuerdo contigo de no pasar de un extremo al otro, cosa bastante habitual en todo lo humano. No obstante tenemos que tener la precaución, visto el actual culto a la imagen y que no nos ocurra como a Dorian Gray (citado en la respuesta al comentario de Marinel) que termina sabiendo que su gusto por la vida la belleza había significado la más vacía de las existencias, en fin, un término medio ¿no, imagina?
      Besos.

      Eliminar
  12. Estas adorable en la foto. Respecto a tu post te diré que el tío más guapo que he visto en mi vida, lo vi en París, en un centro comercial de negros, y era como el carbón... Así que los estereotipos no me sirven... Yo me guio por lo que a mi corazón le gusta o no, muchas veces es más cuestión de actitud que de físico. A mi cualquiera no me vale para el sexo, soy así de rara

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ya conoces el blog, todo es medio en serio medio en broma, pero la guía del corazón es más precisa que la de la razón en estos casos, como ya he apuntado en otra reciente ocasión: la vida no tiene centro. No te aferras a nada y a cambio, recibes absolutamente todo. Unido a tu intuición estoy seguro de que era un hombre muy atractivo.
      Tienes una ventaja si eres rara porque tienes el Paraíso asegurado, ya se sabe: "raro es el que va al Cielo".

      Eliminar
  13. Hay un cuento del libro “El Vagabundo” de Gibrán Jalil Gibrán que habla sobre la Belleza y la Fealdad. Es muy cortito.
    Cierto día Belleza y Fealdad se encontraron a orillas del mar. Y se dijeron:
    -Bañémonos en el mar.
    Entonces se desvistieron y nadaron en las aguas. Instantes más tarde Fealdad regresó a la costa y se
    vistió con las ropas de Belleza, y luego partió.
    Belleza también salió del mar, pero no halló sus vestiduras, y era demasiado tímida para quedarse
    desnuda, así que se vistió con las ropas de Fealdad. Y Belleza también siguió su camino.
    Y hasta hoy día hombres y mujeres confunden una con la otra.
    Sin embargo, algunos hay que contemplan el rostro de Belleza y saben que no lleva sus vestiduras.
    Y algunos otros que conocen el rostro de Fealdad, y sus ropas, no lo ocultan a sus ojos.

    No podemos quedarnos en la superficie, si miramos atentamente podemos llegar a ver y conocer una belleza que pensábamos que no existía.
    Poco más que añadir a tu entrada. Muy buena.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias por tu magnífica aportación. Esta colección de comentarios hacen buena mi percepción de la importancia de todos vosotros. Para mí -que nunca estoy seguro de nada- la belleza es la expresión misma del ser humano, sus emociones. La belleza de una cara es la que expresa algo.
      Gracias.

      Eliminar
  14. Eiii pero si eres monísimo xD.

    Besos baby

    ResponderEliminar
  15. Si hubiese sabido que la publicarías, no me habría hecho la foto.
    Lo feo es tan subjetivo como lo bello, aunque es difícil escapar a los cánones que impone la sociedad.

    Un abrazo

    ResponderEliminar