La niña de cuatro años, a mitad de las vacaciones, dijo: "Esta manzana huele a traje de baño". La frase resume la condición de paraíso enrarecido en que suelen desembocar los días de descanso. No es lo mismo detenerse cuando uno no puede más que interrumpir la costumbre por mandato.
El calendario es un juego de la oca donde toca descansar a la fuerza.
Esa Ítaca variable donde el asueto se defiende y, una vez alcanzado, suele convertirse en el híbrido edén donde las manzanas huelen a traje de baño. Por contraste, la vida anterior adquiere peculiar relieve. Contemplados desde ese momentáneo jardín, los días hábiles brillan con una luz imposible de experimentar como presente. "La vida no se vive a sí misma", escribió Broch. Sólo desde fuera podemos apreciar su decurso. Para eso están la vacaciones, nuestra estancia en la luna.
Breves apuntes sobre cultura y pasión taurina
Has escrito todo un tratado filosófico en pocas palabras..
ResponderEliminarSí señor, para eso están hechas las vacaciones
Jajajajajaja. Siempre es mejor el momento más adecuado.
Eliminar¡Oh sweet Pitt! Te sentaron de maravilla las vacas... que te remodelaron el espíritu.
ResponderEliminarBesanises.
Ese espíritu cautivo en la realidad, jajajajaja.
EliminarBesos.
El olor es la percepción y recuerdo que mas tiempo permanece en nosotros. Saltos y brincos filósofo.
ResponderEliminarJajajaja, filósofo, jajajaja. La magdalena de Proust.
EliminarSaltos y brincos, jajajaja.
Volveré más tarde. Necesito media mañana de lunes para que la parte filosófica de mi cerebro despierte...
ResponderEliminarFeliz semana!
^_^
Jajajajaja, por lo menos que tengas despierto el buen humor.
EliminarFelices días.
Y a mí, que mi tiempo de vacaciones es el que me ponen y no el que quiero. Biquiños!
ResponderEliminarSí, es lo más usual pero no lo más conveniente. Casi siempre pasa lo mismo.
EliminarBesos.
Mis vacaciones de verano huelen a mar y mi traje de baño a šal. No rechazo esta manzana. Tengo suerte de poder disponer de ella en una u otra ëpoca. Me la como igual.
ResponderEliminarBesos
MIs vacaciones huelen a libertad, en realidad mi vida entera intento que huela a libertad. También tengo costumbre - y suerte- de disfrutar en cualquier época, bueno, en todas las épocas.
EliminarBesos.
Entonces esas vacaciones, aunqeu sean forzadas, valen para algo... para apreciar lo que solemos despreciar por monotía... Para valorar lo perdido :) (como siempre)
ResponderEliminarBroch tenía razón, quiza por no vivirse a si misma, tampoco somos capaces de valorar bien lo que tenemos...
Muchos besos
Por ahí van los tiros Sakkarah, como tu perspicacia apunta. Nunca valoramos lo suficiente aquello que es coridiano.
EliminarMuchos besos.
Vida más allá de la vida, realidad ficticia y tan precisa....
ResponderEliminarEntre esas realidades ficticias y esas ilusiones ficticias anda el juego.
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