jueves, 2 de noviembre de 2017
Utopías y marcianos
Hay algo extrañamente autorrefutativo en la idea de utopía. Como sólo disponemos del lenguaje del presente para hablar de aquello que lo trasciende, siempre corremos el riesgo de clausurar nuestros imaginarios en el acto mismo de su articulación. La única auténtica alteridad sería aquella que no podemos pensar en absoluto. Toda utopía es, por tanto, al mismo tiempo distopía, pues al tratar de liberarnos de los grilletes de la historia, no puede evitar recordarnos lo fuertemente que nos maniatan.
Es algo que resulta obvio si se piensa en los abundantes relatos de abducciones alienígenas. Lo que hace que esas historias resulten tan sospechosas no es la exoticidad de los extraterrestres, sino justamente lo contrario: el ridículo aire familiar de esas criaturas, su risible alienigenidad no alienígena.
La excesiva y familair humanizacion del ataque de los ultracuerpos jajajaja
ResponderEliminarBien dicho!!
Tiene su actualidad, hoy por el tópico excesivo (e irreal) de una romántica revolución (también inexistente)...
EliminarGracias.
En verdad me has dejado muda , y te cuento el porque .. tú lenguaje es perfecto y los extraterrestres seguro que si bajan cuentan contigo .. ajjaaj ( es broma ) es que hoy de verás necesitaba decir algo gracioso y te toco a ti ..
ResponderEliminarAhora en serio un escrito con mucho fundamento la utopías como dicen los diccionarios , son proyectos, deseos o planes ideales y eso sabemos que no existen solo en la imaginación de quien lo veo hecho realidad.
Un abrazo ..espero no haberte molestado .
Jajajaja, ¿cómo me puede molestar un comentario tan halagador?
EliminarUn abrazo, y gracias.
Como cuando quieren colonizar a "razas inferiores". Una idea históricamente, bastante europea.
ResponderEliminarAbres aquí un tema que también contiene una curiosa paradoja (ya sabes que adoro las paradojas y todo aquello que pone a la verdad en la cuerda floja, para ver si se sostiene, jajajaja) pero es largo para una respuesta al comentario, ese comentario tuyo que me ha hecho pensar.
EliminarGracias.
En efecto, se agota el lenguaje cumpliendo su cometido, por eso el pensamiento puro sería la verdadera utopía y en un punto álgido de ésta, la transmisión de la delicia conceptual por un medio telepático, si bien volvemos a lo mismo: Se plasmarían en nuestro cerebro y alma las mónadas con el método de códigos y signos que son los lenguajes. De otro lado, el imaginario -¡sobre todo el del fenómeno UFO (ya sabes "...Y Ezequiel vio La Rueda..." en palabras de Mi amada Biblia) en los años 70!- era como dices de parvulario. Ahora bien, honrosas excepciones me vienen a la cabeza como Alien, K- Pax y ya más actual "Los Elegidos". Esta entrada tuya es de lo más saludable que he leído para entrar en estas fechas numinosas novembrinas. Es justo que me despida clamando aquello de "Klaatu Varada Niktu"
ResponderEliminarPost Scriptum : Voy a ver si tengo Una Tercera Fase esta Noche predispuesto como estoy gracias a tí...¡Ah! ¡¡Y a La Filosofía tal como la planteas con estructura diáfana para su comprensión.
¡Mil Gracis M a g i s t e r !
M. P.
Gracias, jajajaja, lo tuyo si que es una cascada de talento.
EliminarOjala existiera una safeword como la de The Day the Earth Stood Still, para emplearla con algún personaje catalán, jajajaja.
Gracias, muchas gracias.
Ahora entiendo porqué me gusta escribir y leer ciencia ficción😃.
ResponderEliminarUn abrazo.
La verdad es que la realidad siempre nos deja un poco tristes.
EliminarImagino que habrás disfrutado con el comentario de MonsúPorasagú.
Un abrazo.
A mi no me gustan esos temas, son bastante miedosa jaja... saludos
ResponderEliminarOs, Susy, si tienes miedo ya te abrazo... y dejarás de tener miedo de los extraterrestres...
EliminarSaludos.
Creo que nos han colonizado
ResponderEliminarY ya se están manifestando abiertamente. En la tele
Saludos
El tema colonial nos lo comenta Vicky desde Bogotá, y siempre que oigo Bogotá mis recuerdos van a Les Luthiers... qué tiempos aquellos...
EliminarEn cuanto a estos tiempos, que se manifiesten por Puigdemont, un personaje del que parece haberse apoderado el espíritu de Frank Underwood.
Saludos.
Saludos.
Yo milando como el chinito....
ResponderEliminarSaludos
Jajajaja, milando, milando...
EliminarSaludos.