Cuentan de una devota marquesa que, ya hacia el fin de sus días y sabedora de ello, era consolada por su director espiritual, el cual le decía: “Señora, le espera el Paraíso, el cielo, dónde todo es belleza y virtud, le espera Dios Padre para bendecirla en el más soñado de los lugares...” Y así todo un discurso de magníficas expectativas a lo que la condesa asentía con la mirada perdida, y reflexiva le respondió: “Sí, padre, sí pero es que, sabe usted, como en casa no se está en ninguna parte”.
si no la gentrifican
ResponderEliminarsaludos
Jajajaja...es buenísimo. Y tenía razón la marquesa que por mucho que nos hablen del Paraíso nadie quiere ir a él.
ResponderEliminarUn abrazo, Pitt
la lógica o en todo caso el sentido común siempre vence... saludos...
ResponderEliminarLa respuesta de la marquesa creo que es muy inteligente...y por supuesto como en casa en ningún lado.
ResponderEliminarUn abrazo Pitt.
Sabia la marquesa...
ResponderEliminarBesos
Como diríamos por acá, vieja pero no boluda
ResponderEliminarAbrazo!
Hola Pitt, a esta marquesa lo que le pasaba es que no quería dejar el mundo de los vivos.
ResponderEliminarMuy bueno si señor, te deseo una feliz semana besos de flor.
No era tonta la condesa, jajajaja. Más vale pájaro en mano.
ResponderEliminarSalu2.
¡Cuánta razón la buena Sra!
ResponderEliminarMuy buena reflexión. Nos pasamos la vida elucubrando e imaginando paraísos y utopías sin prestar mucha atención a lo más próximo...
¡Bien dicho, Marquesa!
ResponderEliminarEsta marquesa sí que sabía.
ResponderEliminarUn beso.
Oye, pues estoy de acuerdo con ella, ja ja ja.
ResponderEliminarBesos :)
Es lo que yo digo!!!
ResponderEliminarBesos
Tocada por la Iluminación.
ResponderEliminarAbrazos
Más vale lo malo conocido...
ResponderEliminarSonrío.
Besos, Pitt.
Ella sí que sabía, jaja.
ResponderEliminarCuanta razón tiene la señora, mejor pájaro en mano que ciento volando como dice el refrán.
ResponderEliminarBesos Pitt
Puri