Muere el maestro del toreo Paco Camino, el Niño Sabio de Camas, a los 83 años
Figura transoceánica, formó la santísima trinidad con El Viti y Diego Puerta en los años 60 y 70 del siglo pasado
Mundotoro recupera su última entrevista realizada por Ismael del Prado a Paco Camino en plena pandemia.
Decía Polonio, en ese fabuloso ‘Hamlet’ de William Shakespeare, que ‘con un cebo de mentiras, pescas el pez de la verdad’. Esa verdad que tantas veces rebosó el traje de luces de Paco Camino. Esas mentiras que bombardean al sector desde el mismo Gobierno, desde la misma vicepresidencia de Pablo Iglesias. Ora ‘incómodo’ porque las corridas de toros sean Patrimonio Cultural, ora ufano por ponerse la medalla de exterminar, cual caballo de Atila, la Tauromaquia. Para Camino, no hay medias tintas: algo huele a podrido en el Estado. Y no es el de Dinamarca. Es el de España. Porque ‘la manera de la que unos bandidos nos está robando el toreo es miserable’, denuncia. Por ello y por mucho más, el ‘Niño Sabio de Camas’, superdotado del toreo con 12 Puertas Grandes en Madrid, es el protagonista de este tercer ‘Héroes de Leyenda’.
-Pregunta: ¿Cómo es un día de esta ‘nueva normalidad’ que nos están vendiendo en la vida de Paco Camino?
-Respuesta: Más o menos igual que antes. Al estar aquí, en ‘Los Camino’, en casa, tengo campo para moverme sin las restricciones que tiene mucha gente. Me levanto pronto y sobre las 9 estoy ya dando una vuelta al ganado. A las 11 desayuno y salgo otro rato a pasear por los cercados hasta la una. Entonces, me ducho, como y me echo la ‘siesta del cordero’. Por la tarde, salgo otra vez a ver los animales y luego ya estoy tranquilo por la casa.
-P: ¿Es partidario de esos paseos en favor de la Tauromaquia que se han querido poner en marcha?
-R: No sé si podría ir hasta alguno por la movilidad, estoy en la finca en Cáceres. Pero, desde luego, animo a todo el que pueda, que no lo dude. Todo el que se sienta aficionado tiene el compromiso de manifestarse. A ver si, de una vez, este Gobierno nos escucha. Lo dudo.
-P: Se han olvidado de las ayudas a los ganaderos, tampoco hay prestaciones por desempleo para los profesionales…
-R: Porque todos se han quitado ya las máscaras. Los políticos nos están tratando muy mal, poco a poco, se han propuesto eliminar la Tauromaquia y están acabando con ella. La manera de la que unos bandidos nos están robando el toreo es miserable.
‘Pablo Iglesias es un sinvergüenza, me da igual decirlo, no me ha callado nadie en una plaza de toros y con dos pitones delante, no me va a callar ahora tampoco nadie desde un sillón en un despacho’
-P: Empezando por Pablo Iglesias, ¿no?
-R: Es un sinvergüenza. Me da igual decirlo, no me ha callado nadie en una plaza de toros, con miles de personas y dos pitones delante, no me va a callar ahora tampoco nadie desde un sillón en un despacho. No respeta nada. Lo que no le gusta, lo quita. Y tiene entre ceja y ceja acabar con el toreo. No sé qué le habremos hecho nosotros, pero él a nosotros nos está robando el segundo espectáculo de masas de este país y nuestra libertad para poder presenciarlo. Estoy muy descontento con la gente del Gobierno. Son unos golfos, el toreo era lo más grande, e insisto, nos lo están robando.
-P: Es el momento de alzar la voz amenazando con lo único que realmente les interesa: las urnas.
-R: Por supuesto, parece que es el único interés que tienen. No se preocupan de las personas, sólo de los votos. Son necios que no entienden que esa gente que vive del toro es gente que se está quedando en el paro, sin nada que comer, sin producir para el país.
-P: Y los ganaderos lo mismo…
-R: Su ruina es enorme. Al final, yo soy ganadero por satisfacción personal. Pero ellos… Camadas enteras y cabezas de ganado que están yendo directas al matadero, que no valen para nada después de años de sacrificio en su crianza. Antes, el beneficio de la Fiesta era riqueza para todo el país.
-P: ¿Ve alguna solución que se pueda tomar desde dentro del sector?
-R: Quiero tener un halo de esperanza. Pero, como no nos reunamos y salgamos con soluciones, esto se acaba. Necesitamos un punto de inflexión, dejar atrás todos los bandos y pensar en colectivo. Como decía antes, pensar en el provecho común, no en el particular, porque si hay desconfianzas y cada uno es receloso con los demás… Los de fuera, no van a perdonar, ya estamos asistiendo a ello.
‘Esos protocolos tan estrictos que han puesto no se pueden cumplir. No es que sea complicado dar toros, es que es imposible. Pensaremos que es por una cuestión de salud…’
-P: Tampoco ayuda demasiado el rosario de ferias que se está cancelando por el coronavirus.
-R: Fallas, Castellón, Sevilla, Madrid, Jerez, Pamplona, País Vasco… Una detrás de otra. Es normal. ¿Qué queremos? Esos protocolos tan estrictos que han puesto no se pueden cumplir. No es que sea complicado dar toros, es que es imposible. Pensaremos que es por una cuestión de salud. Si el fútbol, con todo el apoyo económico que tiene, los campos van a estar vacíos… Imagínese las plazas de toros…
-P: Vamos que no ve saliendo un toro de chiqueros en el resto de 2020.
-R: Ojalá al menos se pueda dar San Miguel o algo de Otoño en Madrid. Hay algunas propuestas en Andalucía y en sitios puntuales. Veremos a ver…
‘¿TOREROS ACTUALES? TALAVANTE, JOSÉ TOMÁS Y GINÉS MARÍN’
-P: ¿A qué toreros le hubiera gustado ver este año a Paco Camino?
-R: De los actuales, Alejandro Talavante, José Tomás y Ginés Marín. Tienen algo diferente. El caso concreto de Talavante es una pena por su regreso. Todo el mundo estaba deseando verle otra vez de luces. José Tomás, qué decir de él, y Ginés tiene un corte de torero bueno. Muy puro y muy de verdad, sobre todo, el embroque que tiene.
-P: Este 2020 era también el del 60º aniversario de su alternativa en Valencia: fue el pasado 17 de abril.
-R: Una fecha preciosa, sí. Son recuerdos muy antiguos para mí, pero también muy bonitos. Como, en realidad, todos en la vida que he tenido. No borraría ninguno. Entonces era diferente, llegar un novillero a una capital como Valencia, una plaza señera… La alternativa era el día de mayor satisfacción para cualquier chaval como yo era entonces.
-P: Luego, vino una docena de Puertas Grandes en Las Ventas, El Viti aparte, ningún torero de a pie ha salido más veces en hombros.
-R: Sí, mi registro en Madrid es una marca fabulosa, pero, oye, que mis tres años me costó entrar en esa plaza. El público de Madrid es soberano, el que más entiende. Es así. Mi toreo tuvo algo que ellos veían y les gustaba. Sería mi concepto, mi forma entender al toro… Entonces, era más delicado ponerse en el sitio que cogen los animales, porque eran embestidas más fieras, había que saber el oficio mejor, ahora están más endulzados. Son más grandes, con más pitones, pero también, son más dulces.
-P: ¿Tan abismal es el cambio de aquella Tauromaquia con la actual?
-R: Que se lo pregunten a Manolo Vázquez o Antoñete… Hasta el tramo final de sus carreras, también lo notaron, los toros no les dejaban respirar en sus faenas. Ahora, en todas las faenas, están igual con los toros. Da igual el tipo de astado que tenga enfrente. Nosotros conocíamos más el oficio, sabíamos andar delante del toro… ¡Y nos pegaban diez o doce volteretas los toros cada tarde! Yo tengo más de 30 cornadas en el cuerpo. Pero nos daba igual. Seguíamos como si nada.
‘La afición de Madrid quiere a Talavante ¿Por qué? Porque va con todo. Tres o cuatro veces al año: las veces que haga falta y con las ganaderías que haga falta. No se puede ir a San Isidro un día… Para eso, no vayas’
No hay comentarios:
Publicar un comentario