Seguidores

viernes, 18 de septiembre de 2020

Dolor


 

Seguro de fascinar al alumnado, el profesor nos contaba la historia del escorpión que, atrapado en un círculo de fuego, se clavaba el aguijón a sí mismo porque prefería la muerte al dolor. 

Cualquier cementerio convencional confirma que el ser humano tampoco está por la tarea de sufrir: allí todo el mundo descansa por fin en paz. Yace uno confortablemente muerto, disgregado de su conciencia y sus sentidos, imposibilitado de tocar el arpa y saborear el vino, pero por lo menos libre de dolor. El dolor es mala manera de contemplar amaneceres y no hay peor dolor que el que perfora a uno mismo. Un dolor pasajero te rompe una tarde. Un dolor crónico es la medusa que, nadando dentro de tí, consiste en tu vida enteramente.

El dolor no sirve para nada, más que para sufrir, pero a partir de ahí puedes plantear las cosas con mucha conciencia, te puede dar conciencia de todo, percibimos a partir del dolor.

25 comentarios:

  1. Poco que añadir Pitt. Llevas toda la razón. Hace poco, he visto como el dolor consumía de forma lenta pero implacable a un ser querido, hasta llevárselo. Su rostro reflejaba la máxima paz al descansar al fin.
    Conozco también amigos que sufren dolores crónicos, y dependiendo del día, pueden o no hacer su vida normal. Y son dolores "de por vida".
    Definitivamente, el dolor es mal compañero.
    Besos :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Mal compañero pero ahí está, par hacernos conscientes.

      Besos.

      Eliminar
  2. Conozco muy bien el dolor crónico y no acabo de entender qué hace aquí, instalado en mi cuerpo.
    Sobrellevamos el dolor mientras percibimos el mundo, quizás de otra manera, entendiendo las cosas desde otro punto de vista y relativizando otras molestias propias y ajenas.
    Salud
    Francesc Cornadó

    ResponderEliminar
  3. Hola Pitt. Un tema muy interesante siempre, pero ahora en estos tiempos en que las personas tienen tanto dolor, es mucho más importante. Esta semana me comentaba mi compañero que el tren se había retrasado porque había arrollado a una persona. Hay que tener mucho valor para suicidarse. No todos pueden hacerlo. Hay que estar muy mal, tal mal, hasta el extremo de no importar nada la vida. Supongo que como en todo hay personas que aguantan más el dolor que otras y sin saber el porque de esto. Yo ahora mismo afortunadamente no tengo ni dolores crónicos, ni dolor en el alma. Cuando las personas desde la infancia sufren mucho, se hacen duras, son capaces de superar todo tipo de dolores.
    La imagen es como el hombre de barro hecho añicos.
    Saludos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Todo tiempo arrastra sus sufrimientos. Imagina las guerras mundiales.

      Saludos.

      Eliminar
    2. Así es Pitt, las guerras mundiales han traído mucho sufrimiento, y por eso todas las personas o la gran mayoría de ellas que pasaron por cualquiera de esas guerras, son más fuertes y toleran mejor las enfermedades, dolores y desgracias.
      Saludos

      Eliminar
  4. No puedo hablar mucho sobre el dolor físico porque de momento tengo suerte y solo he padecido algún dolor puntual, no crónico. Imagino que ese dolor te puede llevar al dolor mental y como dice Francesc no podrás ver la vida con los mismos ojos que cuando no lo sentías.
    Que el escorpión se clava su aguijón creo que es algo que pasa más a menudo de lo que pensamos. Mi abuela, mujer vital como pocas, cuando vino un dolor que le condicionaba totalmente la vida decidió partir, no de un día para otro, simplemente se negó a vivir y su cuerpo fue a menos, hiciésemos lo que hiciésemos, hasta que un día no amaneció. Yo sé que ella era tan peleona que le dijo a la muerte cuando era su hora.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. En ese sentido la Naturaleza es sabia, y también la mayor asesina en serie de la historia de la Humanidad.

      Eliminar
  5. Hay algunos seres (a mi juicio, enfermos...o quizás muy confundidos) para quienes el dolor es parte de su vida. Lo usan como aliciente precisamente, para sentirse vivos. Pero son los menos, afortunadamente.
    Buena reflexión.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si acaso el dolor debe ser aceptado pero, como bien dices, no deseado como algo enfermizo.

      Un abrazo.

      Eliminar
  6. Un tema que abarca muchísimo y, sobre todo, muy personal; pues cada uno lo vive o lo ha vivido de distinta manera o intensidad, pero, en cualquier caso, los que lo conocemos de cerca (o en propia piel), bien sabemos lo que representa esa magnífica imagen que has puesto como referencia, así como tus certeras palabras.
    Y quizá por ello, aunque pueda parecer tópico y filosofal, quien ha estado inmerso en la tormenta, entiende, vive y disfruta con mayor ímpetu y devoción, la calma y todo aquello que le proporciona esa paz espiritual y mental, pues ambas se relacionan, que mitiga o disfraza ese dolor…

    Magnífica entrada, Pitt.

    Bsoss, y feliz finde.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por tus palabras y eimpre acertdos y enjundiosos comentarios.

      Besos.

      Eliminar
  7. Una buena reflexión sobre la inutilidad del dolor per se. Y encima a los dolores de toda la vida ahora tenemos que sumar los del covid, esa sensibilidad al dolor aumentada y el intenso sufrimiento que produce durante y después en tanta gente de la que da la impresión que silencian sus testimonios para que no lleguen más allá de alguna de las asociaciones que se han creado. Un beso grandote

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es verdad que en estos meses al dolor individual hay que sumar ese dolor social que nos llega a todos.

      Un beso grande y gracias por tus palabras.

      Eliminar
  8. Qué cierto Sr. Pitt, el dolor además nos recuerda que estamos vivos. La semana pasada estuve prácticamente de baja por un dolor de colon confundido con apendicitis (descartada por cierto en urgencias). Dieta estricta, despedirme de ese maravilloso café mañanero con tal de no volver a pasar por ese dolor paralizante. Igual el año pasado por estas fechas con una tendinitis que me llevó meses recuperar.
    Creo que mi cuerpo sabe que llega el otoño y se pone con achaques.
    Como me dijo un día un médico en Coruña: te piensas que tienes 20, pero tu cuerpo te recuerda que ya vas por los 30... imagínese ahora con una década más.
    Feliz finde.
    Sin Dolores por favor

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ya sabes que hay un dicho inglés que dice que la vida empieza a los 40, así que no presumas de pocos años, jajajajajaja.

      Sin dolores y con muchas ganas de vivir y de pasar un buen finde como te deseo.

      Eliminar
  9. El dolor es la lacra de la enfermedad, el ser humano no está preparado para él al igual que para la muerte, y debemos con
    Besos y una feliz noche.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues debemos prepararnos porque las dos cosas son inevitable e inherentes a la vida.

      Besos.

      Eliminar
  10. ¡Uff, el dolor! Es tremendo. Cuando es insoportable te hace hasta perder la razón, hacer cosas que no harías jamás... ¿figúrate a todas esas personas que les han dado algún tipo de tormento para que hicieran o dijeran lo que no querían! El dolor nos domina y la muerte puede ser una gran liberación. ¡Mejor no tenerlo!
    Un abrazo, Pitt

    ResponderEliminar
  11. Buena reflexión.
    Hay distintos tipos de dolor .
    ¿Hablamos del físico o del moral?
    Hay técnicas psicológicas que ayudan a apalear el dolor físico además de lo medicamentos.
    Con respecto al dolor moral, por incomprensible que este sea, por profundo que sea,
    las veces que se supera, uno se vuelve más consciente y agradecido que lo que aún te queda.
    Hay dolores tan crueles, como la pérdida de un hijo, que jamás pueden superarse,
    pero aprendes a vivir con ello, porque tienes otros seres que te necesitan.
    Porque la vida, aún tiene sentido.

    En fin, es un tema profundo.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Temo al dolor en tanto en cuanto el recuerdo de la felicidad ya no es felicidad, sin embargo el recuerdo del dolor es todavía dolor.

      Un abrazo.

      Eliminar
  12. Gran reflexión, hay dolores que solo se irán con la muerte, que triste pero cierto. Un gusto leerte. Saludos.

    ResponderEliminar