Abundio Nomentero iba paseando por la calle. Llevaba 10 euros en el bolsillo. De pronto, su vista reparó en un billete de 5 euros que estaba en el suelo. Se agachó y se lo echó al bolsillo. ¡ Qué bien !, pensó, hoy llevo una ganancia del 50 %. Abundio Nomentero, estaba resfriado. Sacó su pañuelo del bolsillo y se sonó, sin reparar que al sacar el pañuelo, su billete de 5 euros, había salido del bolsillo y tomado el camino de mínima energía según las leyes de la termodinámica. O sea, se había ido nuevamente al suelo.
Un rato más tarde, nuestro protagonista, fué a tomarse un café. Al ir a sacar el billete de 5 euros, reparó en que lo había perdido. Fácil vino, fácil se fué. Entonces, siempre positivo penso: He perdido un 33 %, de modo que aún gano un 17 % a pesar de todo.
Pues menos mal que no ha hecho la siguiente reflexión: si se hubiese encontrado, y luego perdido, un billete de 20.-euros, habría ganado nada menos que un ¡133% !
ResponderEliminarLa idiotez es una enfermedad extraordinaria, no es el enfermo el que sufre por ella, sino los demás.
ResponderEliminarhabrá quien diga que es optimismo, yo igual que tu pienso que es idiotez...
ResponderEliminarQué razon tienes Pitt. Y tal y como están hoy en día las cosas, viene bien ser un poco idiota de vez en cuando...
ResponderEliminarLo bueno de Nomentero, jajaja. Es que ni sufre ni se acongoja. Que bien hace muchas veces no enterarse. Ojos que no en corazón que no siente. Planito y positivo forever, pa' que sufre.
ResponderEliminarAbrazos.
Soy pésima para las matemáticas... pero hoy escojo creer que lo dicho es cierto.
ResponderEliminarSobre la gente así, no hay mucho que acotar. Ah, bueno, una frase de Fernando Delgadillo (cantautor mexicano) podría ser deliciosa:
"Cuando al imbécil le mostraron la luna solo pudo ver el dedo del que se la señaló"...
Jaja, buenísima entrada.
Un gracias gigante por darle un toque de humorcillo oscuro a mi noche...
Sustituyamos el nombre por el de casi cualquier país y tendremos la historia del mundo.
ResponderEliminarMmmm, una persona idiota pero optimista y que sabe utilizar las matemáticas!!! un peligro para la sociedad, podría pasar por persona normal y todo, bueno, salvo por lo de saber usar las matemáticas...
ResponderEliminarY es que en la ignorancia, reside la felicidad.
ResponderEliminarMarikosan
Con ese nombre y ese apellido no podía acabar siendo un heroe. Lo curioso es que razone matemáticamente a esos niveles. Desde luego es cierto que los tontos son más felices.
ResponderEliminarGracias por hacerme reír esta tarde.
ResponderEliminarHasta los idiotas tienen respuestas aún más idiotas, si cabe, que les hace igualmente dichosos.
Yo en su lugar hubiese soltado algún improperio, fijo.
-Bs-
Bueno, el que no se consuela es porque no quiere.
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