Palencia: El Juli sigue… y Rufo también, a pesar del palco
Cortó dos orejas en una tarde de figura; actitud, ambición y fe tremendas de Tomás Rufo, a quien el palco y la espada cerraron la Puerta Grande
El Juli dio la medida y la dimensión de la figura del toreo que es en el día grande de San Antolín de Palencia, donde abrió la Puerta Grande tras cortar dos orejas de un lote manejable de Montalvo, que se dejó aunque sin llegar a romper. Debió cortar una oreja del tercero, que no paseó por su fallo a espadas, y dos del sexto por la cerrazón del palco Tomás Rufo, que demostró una actitud, una ambición y una fe tremendas con su lote, especialmente en el que cerró plaza, que no veía nadie, y al que terminó cortándole una oreja con fortísima petición de la segunda, bronca al palco incluida. Manzanares, posiblemente con el mejor lote, muy bravo, exigente y enrazado el segundo y con un bien pitón derecho el quinto, quizá no tuvo su tarde.
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