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viernes, 13 de mayo de 2011

Consejos

No consideréis mucho los "consejos". La mayor parte consisten en recomendaciones del tipo "sé comedido y razonable en lo que digas", algo que se contradice ya que la realidad empírica no es "comedida", y su propia versión de la "racionabilidad" no se corresponde con la definición convencional que sostienen personas intelectualmente poco cultivadas. Ser un genuíno empírico significa reflejar la realidad con la máxima fidelidad posible; ser honrado implica no tener miedo a parecer extravagante ni a las consecuencias de ello. La próxima vez que alguien te dé la lata con unos consejos innecesarios, recuérdale el destino del monje a quien Iván el Terrilbe condenó a muerte por dar consejos que nadie le había pedido (y además moralizantes). Como cura a corto plazo, funciona.

7 comentarios:

  1. Consejos vendo que para mi no tengo....

    Qué es lo que te han aconsejado que no te ha cuadrado querido??????

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  2. Siempre es bueno dar consejos, pero darlos buenos es fatal.

    esta es mejor todavía;

    A los viejos les gusta dar buenos consejos, para consolarse de no poder dar malos ejemplos.

    un saludo

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  3. Como técnica disuasoria anti consejos no está nada mal, tomo nota. Yo no soy de consejos salvo que me los pidan, pero sí sé escuchar, que creo que es bastante.

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  4. Iván el Terrible estaba loco pero nole faltaba sentido del humor (macabro). A mí tampoco me gustan los consejos que no pido y no suelo tener en mucho a quién me los pide constantemente. A los ciegos no les gusta que los lleven del brazo, prefieren cogerse ellos al tuyo. A mí tampoco me gusta que me guíen como si fuera un niño o un atontado. Estoy contigo.

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  5. Y lo fácil que es dar consejos y no mirar la mierda en la que estás metido!

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