El reciente eclipse me hizo volver los ojos hacia la luna. Siempre la tenemos y no la miramos lo suficiente. Dejemos que sea Becquer quien nos inspire a reconocer su belleza:
"En el majestuoso conjunto de la creación
nada hay que me conmueva más hondamente
que acaricie mi espíritu y
dé vuelo desusado a mi fantasía como la luz
apacible y desmayada de la luna"
...La de horas que he pasado mirándola y soñando.
ResponderEliminarLa de poemillas que le escribí.
La luna ejerce sobre mí una especie de conjuro hipnótico, quizás en el fondo porque soy un poco bruja. Me fascina, me encanta. De hecho, mi primera novela se llamaba ¿Dónde está la luna?
ResponderEliminarUn besote
Yo creo que sí. Que miramos cada vez que podemos a la luna para comprobar que sigue ahí para seguir escuchando nuestras confidencias.
ResponderEliminarTu comentario era muy escueto pero decía mucho más de lo que aparentaba a simple vista. Gracias.
Brisas y besos.
Malena
Y lo que más nos atrae...que nadie la poseerá antes que nosotros.
ResponderEliminarSalu2
Hablando de Becquer y de la luna... mi entrada de ayer en mi blog era sobre Becquer, y en el de mi padre, un poema a la luna.
ResponderEliminarMe ha resultado curioso, casual, ¿no? Quizá porque la luna es poesía, embrujo, magia...
http://www.youtube.com/watch?v=RtlDEoevtBY&feature=related
ResponderEliminarMariko
Rayo de luna.
ResponderEliminarPreciosa tu entrada y mágica, como no podía ser de otra forma hablando de la luna.
Besos y buena semana
Hoy estás animando todos mis sentidos... ahora citas a Becquer!
ResponderEliminarA mi me gusta tener la luna muy presente, tengo la manía de buscarla siempre cada noche que tengo oportunidad. Una lástima haberme perdido el eclipse
Yo creo que no existe un poeta sobre la tierra, ni que haya existido, que no mire, se inspire o hable de la luna, creo que la luna ha sido una musa universal y sobre todo muy democrática.
ResponderEliminarVeré si encuentro unos versos que hice de luna y los publico en estos días.
Abrazo.