Introduzco la variante de publicar en la misma entrada dos fragmentos de sendos artículos aparecidos, con unas páginas de diferencia, en el semanal MujerHoy que, advierto no voy a comentar, porque siento vergüenza de mí mismo:
Título: Somalia, un éxodo sin fin. Por A-S. Lechevallier: "A través del polvo y la miseria, miles de mujeres y niños somalíes huyen del hambre y la guerra hacia (...) Ha recorrido cientos de kilómetros en vano para encontrar ayuda. La tela de colores en la que llevó a su hijo hasta Mogasdicio servirá de mortaja."
Título: ¡Unas mangas, por Dios!. Por Edurne Uriate (periodista y politóloga)(sic): "Pasé media vida buscando el vaquero perfecto y voy camino de pasar la otra media buscando el vestido perfecto. Ahora acumulo varios vaqueros maravillosos, el último, pluscuamperfecto más bien, el 1969 de Gap, pero, lograda la meta, apenas encuentro ocasiones para ponérmelos..."
¿Pluscuamperfecto? Puta vida.
Lo siento, Pitt, pero me quedé muda. Todo lo que diga sonará absurdo y manido. Me uno a tu vergüenza.
ResponderEliminarYo también.
ResponderEliminarEstas cosas suelen ser tan frecuentes...yo, desgraciadamente, ya no me escandalizo. Supongo que han conseguido su objetivo: insensibilizarnos, mercadear con todo...
ResponderEliminar¿A quién se le ocurre que a la persona que le interese la primera noticia le interesará la segunda "noticia", así que deben ir obligatoriamente en el mismo ejemplar del que hablas?
ResponderEliminarY, ¿qué clase de persona escribe que se ha tirado media vida para buscar unos vaqueros perfectos y ahora pasará la otra media vida buscando un vestido perfecto? Vaya mierda de vida debe llevar esa tía, acorde con la protagonista...
Qué ascazo...
Saludos, asomo hoy por primera vez a tu blog.
Recomiendo encarecidamente leáis o en su defecto veáis la película, flor del desierto. No añado nada mas tampoco.
ResponderEliminarUn beso
Marikosan
Logradas metas de semejante envergadura, poco le queda por hacer ya en la vida. Tal vez, ¿buscar el sostén perfecto? o ¿las bragas del destino?
ResponderEliminarSupongo que tu como yo estarás muerto de envidia, quien encontrase unos vaqueros similares, ¿a que más puede valer la pena dedicar nuestra existencia?.
ResponderEliminarDios mío, qué horror!, qué tristeza!
ResponderEliminarUn abrazo.
Dos noticias demasiado extremistas y metidas en el mismo saco también, algo muy frecuente a día de hoy, que vemos las noticias sin apenas inmutarnos una mayoría. Yo quiero pensar que este tipo de cosas nos remueven las entrañas por dentro, pero, ¿no es cierto que la mayoría de veces convertimos nuestra indignación tan solo en meras palabras?
ResponderEliminarUn abrazo.
Lo que el primer mundo considera una necesidad de primera el tercero lo encontraría rsible. me hace reflexionar sobre la incapacidad del hombre-mujer para ser feliz. Tenga lo que tenga siempre le falta algo. Y en cuanto a lo de no pensar en otros que están peor... Bueno, es evidente que ya las dos noticias hablan por sí solas.
ResponderEliminarTambién añado que es inevitable tener algo de sensibilidad y no pensar que en el segundo ejemplo hay una persona superficial y vacía a la que habría que darle el bofetón de enfrentarla a la realidad. El bofetón es metafórico, ojo. Y bueno, tampoco creo que escriba esas tonterías con maldad.
Realmente, vivimos entre sonrisas y lágrimas.
ResponderEliminarBuen post.
Salu2
el mundo, la vida, sus dimensiones y sus microuniversos.... unos intentan sobrevivir al desierto, otros intentan sobrevivir a las arrugas.... unos son felices pisoteando un charco, mediodesnudos y desnutridos, otros infelices sino tienen la ultima versión del FIFA para Nintendo....
ResponderEliminarlas perspectivas, las situaciones, que es grande y qué es pequeño?... es amoral gastarse 200 euros en unas zapatillas o 1000 en una entrada para los toros mientras otra gente vive esas dimensiones.... está claro que existen, en este puto planeta, varios planetas.... y según donde te haya tocado la china puedes ser feliz pescando peces con una caña, un desgraciado porque el Porsche no lleva la tapicería que anhelabas o ni siquiera tener la oportunidad de vivir o sufrir como el pequeño del desierto...
es la loca paradoja de esta mundo bizarro y surrealista que a veces dan ganas de no mirar más... buen post queridos