Seguidores

jueves, 14 de abril de 2022

Efemérides taurinas. Juan Belmonte: un torero de leyenda. 130º aniversario de su nacimiento.

 



El torero Juan Belmonte fue el favorito de intelectuales y artistas, a quienes llevó a los toros fascinados por su intensidad dramática. Un grupo de ellos, encabezados por Valle-Inclán y Pérez de Ayala le ofreció un homenaje el 28 de junio de 1913 y firmó el siguiente texto:

«Ya que Juan Belmonte se encuentra entre nosotros, hemos juzgado necesario obsequiarle con una comida fraternal en los jardines del Retiro. Fraternal porque las artes todas son hermanas mellizas, de tal manera que capotes, garapullos, muletas y estoques, cuando los sustentan manos como las de Juan Belmonte y dan forma sensible y depurada a un corazón heroico como el suyo, no son instrumentos de más baja jerarquía estética que plumas, cinceles y buriles. Antes los aventajan, porque el género de belleza que crean es sublime por momentáneo, y si bien el artista de cualquier condición que sea se supone que otorga por entero su vida en la propia obra, sólo el torero hace plena abdicación y holocausto de ella»

Conocida es la invitación de Valle-Inclán : "a usted, torero excepcional, lo único que le falta es morir en el ruedo", "se hará lo que se pueda, don Ramón" le contestó el diestro con su retranca sevillana. Belmonte, que no pudo cumplir el encargo que le hizo Valle-Inclán de morir en la plaza, se pegó un tiro en su finca décadas después. Había nacido en Sevilla el 14 de abril de 1892 y se quitó la vida el 8 de abril de 1962.

2 comentarios:

  1. Este era uno de los preferidos de mi padre, siempre le oí decir que a parte de torero era elegancia en el ruedo y valentía al templar la muleta ...Y recuerdo así algo sobre unas vendas sucias que le trajeron suerte hasta que le empitono un toro no sé en que plaza y desde entonces ya no quería esas vendas sucias jaja. En fin el arte tiene sus manías.
    Un besote grande Pitt y te deseo unas felices Pascuas.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo contaba el mismo Belmonte: "Un día, cuando me estaban vistiendo para una corrida, advertí que mi mozo de estoques me colocaba en los pies, antes de las medias rosas, unas vendas no muy limpias. Le dije:

      -Antoñito, quítame esas vendas y ponme otras más limpias.


      Me replicó:

      -Cállate, y déjame a mí. Yo sé lo que hago. Estas vendas te darán suerte.

      Cuando uno está preparándose para ir a la plaza, y aquella tarde era la de Madrid, no se tienen ánimos para llevarle la contraria a supersticioso alguno. Fue mi famoso triunfo del 2 de mayo. Antoñito, al quitarme el traje, decía loco de alegría:

      -¿Lo ves? ¡Son las vendas de la buena suerte!

      En las corridas siguientes no me atreví a rechazar las vendas, cada días más sucias. Gracias a que al poco tiempo un toro de Santa Coloma me empitonó y me dio una cornada en el muslo. Desangrándome me llevaban a la enfermería; cuando vi a mi mozo de espadas corriendo por la barrera cerca de mí, le grité:

      -Antoñito, ¡mira para que sirven tus cochinas vendas!»

      También decía el sacástico Pasmo de Triana: "Yo no soy supersticioso porque da mala suerte".

      Gracias Campi por recordarnos al siempre ocurrente Belmonte. Besos y felices días.

      Eliminar