Perera y la perseverancia del toreo
Crónica de la 3ª de las Corridas Generales de Bilbao
Lleva años Miguel Ángel Perera haciendo y diciendo uno de los toreos más perfectos técnicamente del escalafón en todas las plazas. Temple, trazo largo y dominio de todas las distancias. Una insistencia tan sincera como escasa de fortuna, siempre en el límite y en el horizonte del posicionamiento definitivo. La espada le impidió un triunfo de tono mayor en la tarde hasta el momento de su temporada. Dimensión de dominar la bravura más exigente con la mayor arma del temple y el poder de la mano baja con el escudo de la hondura y el asiento. Importante faena de Juan Leal, que regresó a Bilbao, sustituyendo a Daniel Luque y cuajó una faena a tener en cuenta. Una corrida de toros de Fuente Ymbro en la que hubo de todo y para todos, pero en la que destacaron tres toros de gran interés y sumo matices, entre el paréntesis de la nobleza y la bravura más indómita. Entre esas variables dos de los tres toros más deslucidos fueron a parar a las manos de Leo Valadez, al que le funcionó bien la cabeza.
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