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lunes, 13 de mayo de 2024

Manifiesto de la Tauromaquia. VV.AA.

 



Presentado el Manifiesto de la tauromaquia

Se presentó en Madrid el libro Manifiesto de la Tauromaquia. Un acto al que acudieron numerosos aficionados y personalidades del mundo taurino como el matador César Rincón, el matador y banderillero, Luis Miguel Calvo, protagonista de la recordada serie televisiva como fue Juncal; o el ganadero Antonio Bañuelos.



Manifiesto de la tauromaquia

-reducido-
(20 argumentos que protegen e impulsan la tauromaquia)

1.- La Tauromaquia forma parte del patrimonio cultural español

La Tauromaquia es, por ley, el conjunto de conocimientos y de actividades artísticas, creativas y productivas, incluyendo la crianza y selección del toro de lidia, que confluyen en la corrida de toros moderna, el arte de lidiar, expresión relevante de la cultura tradicional del pueblo español. Se entiende comprendida en la Tauromaquia, toda manifestación artística y cultural vinculada a ella.

2.-La Tauromaquia ha evolucionado a lo largo de la historia

La Tauromaquia tiene su raíz en el festejo popular, derivado de rituales con toros bravíos, cuyos antecedentes en la península Ibérica se pierden en el pasado lejano. En la Edad Media, coincidieron los festejos populares a pie, con los de la nobleza a caballo.

Con la llegada al trono español, en 1700, del primer rey Borbón Felipe V, partidario de otras formas de diversión para la Corte, comenzó el declive de la corrida caballeresca, propiciando el nacimiento de lo que más tarde llegaría a ser la corrida de toros

3.- El festejo popular cada vez tiene más fuerza

La tauromaquia popular tiene hoy en día una importancia social, económica y cultural que va en aumento por la demanda de participantes, de aficionados y espectadores y la gratuidad del espectáculo, o el precio reducido del mismo, y el arraigo en el medio rural, que lo siente como una de sus señas de identidad.

4.- La Tauromaquia constantemente amenazada

A lo largo de la historia, las diferentes culturas que han habitado la Península Ibérica, no pudieron terminar con el rito del sacrificio del toro, que el pueblo mantuvo con fuerza y determinación, ni con los juegos con reses bravas.
En el siglo XVI, el principal enemigo de aquella Tauromaquia incipiente, fue la propia Iglesia, con el Papa Pío V a la cabeza. En los siglos XVIII y XIX llegaron las prohibiciones reales, totales o parciales, desde el rey Felipe V (en 1704) hasta el rey Carlos IV (con la Pragmática de 1805). Ya en este siglo XXI el movimiento animalista se ha hecho fuerte con el acoso a la Tauromaquia.

5.- La raza de Lidia es la raza bovina autóctona española más importante

El toro de lidia es la mayor aportación genuina española a la zootecnia universal. Es un animal único que atesora un importante caudal genético, que se ha exportado al resto de países donde se practica la Tauromaquia (Portugal, Francia, México, Venezuela, Ecuador, Colombia y Perú).

La elevada distancia genética que hay entre los diferentes encastes actuales, es fruto de la actividad de los ganaderos, que fueron dejando su impronta personal en la selección y mejora, por lo que estos encastes cuentan con importantes diferencias morfológicas, genéticas y de comportamiento.

6.- La raza de Lidia contribuye al mantenimiento de la biodiversidad

Una gran parte de las ganaderías de lidia españolas, se enmarcan en el ecosistema de la Dehesa, que es un ecosistema agro-silvo-pastoral de gran valor medioambiental y de mantenimiento de la biodiversidad.

La Dehesa en su conjunto es una gran mancha verde situada en el sur de Europa, con unos 5 millones de hectáreas, entre España y Portugal, de una gran riqueza paisajística, que ayuda al secuestro del CO2, que es el gas de mayor efecto invernadero del planeta.

7.- La cría del ganado de Lidia registra los mejores niveles de bienestar animal

La Organización Mundial de Sanidad Animal, basa su valoración del bienestar animal en cinco principios o libertades: 1. Libre de hambre y de sed; 2. Libre de temor y de angustia; 3. Libre de molestias físicas; 4. Libre de dolor y de enfermedades y 5. Libre para manifestar su comportamiento natural. El ganado de Lidia cumple con creces estos requisitos durante su cría en extensivo.

8.- La Tauromaquia es un importante revulsivo para el medio rural

Las fincas ganaderas donde se cría el toro de la raza de Lidia, destacan por su importancia socioeconómica, pues fijan población rural en zonas poco pobladas, propiciando elementos de cohesión social e identidad cultural.

9.- La bravura del toro de lidia es una creación cultural de los ganaderos

Los ganaderos de la raza de Lidia, llevan practicando durante varios siglos, una prueba de selección específica, la tienta, de modo que solo se ganan la condición de reproductores, hembras y sementales, aquellos animales que superan dicha prueba. Sus criterios de selección, sujetos a matices personales, enriquecen una oferta variada de genética, morfología y comportamiento, creando una raza sin parangón en el contexto de la producción animal en el mundo.

10.- El toro de Lidia es un animal criado para luchar

Gracias a los estímulos cutáneos producidos por la divisa, puya y banderillas, y a la respuesta neuroendocrina que provocan, el toro se adapta a la lidia, porque consigue atenuar el estrés y superar el dolor físico en el transcurso de ésta.
El toro supera el dolor gracias a una rápida y alta liberación de beta-endorfinas y meta-encefalinas cerebrales, sustancias opiáceas endógenas, que bloquean los receptores del dolor.

11.- La corrida de toros en continua evolución

La corrida de toros, aunque a los aficionados les parezca inmovilista, siempre ha estado en evolución.

Ante la creciente protección de los animales en la sociedad actual, se hace necesario eliminar parte de las heridas y de la sangre innecesarias, que se producen durante la lidia, siempre manteniendo la esencia de ésta.

Existe en la actualidad una propuesta real de modificación de los seis útiles de la lidia, divisa, puya, banderillas, espada, descabello y puntilla, que van en esta dirección, es un auténtico tsunami de innovación de la corrida de toros, que nunca se había producido hasta ahora.

12.- El toro de lidia puede ganarse el indulto

Puede hacerlo combatiendo para librarse del sacrificio en el ruedo, ganándose el derecho a la vida, a través del premio del indulto, oportunidad de la que están exentos el resto de los animales de producción, destinados a morir en el matadero.

13.- La Tauromaquia es cultura

Los animalistas afirman que “los toros no son cultura, son tortura”, otra gran falacia que ofende a los aficionados, y al resto del público con sentimiento artístico, pues las siete artes fundamentales y las artes aplicadas o accesorias, se han inspirado siempre en la Tauromaquia.

14.- Las falsedades del movimiento animalista

La filosofía animalista, que está detrás de todos los ataques a la Tauromaquia actual, defiende la igualdad entre el hombre y los animales, a los que se les quiere asignar los mismos derechos que a los humanos.

Los animales no pueden tener derechos porque “no pueden crearlos, no saben explicarlos ni tampoco administrarlos” y, nosotros, los humanos, estamos obligados a cuidarlos, a protegerlos, a no torturarlos, ni tampoco abandonarlos.

Alegan que “el toro bravo sufre en el ruedo y en la calle”, cuando los animales no padecen sufrimiento al estilo de los humanos, pues este es privativo de la condición humana.

15.- El toreo es un arte vetado injustamente

El torero, es el único artista, que compromete su vida con su obra. Con los continuos e injustos ataques, provenientes del animalismo, ha pasado de ser un ídolo de masas, a ser un artista vetado, al que llaman asesino.
¿Existen en el planeta mayores héroes contemporáneos que los toreros? ¿Y qué decir de las toreras?

16.- El culto de los aficionados a la bravura del toro

La historia de la Tauromaquia está llena de vacas y de toros admirados y recordados por el buen comportamiento, por su bravura, en los festejos taurinos de lidia ordinaria y en los festejos populares, y que ocupan espacio en las mentes de los aficionados, en las tertulias, en los libros, en los videos, en las redes sociales…

17.- La Tauromaquia es legal y los poderes públicos deben protegerla y fomentarla

La Tauromaquia en España nunca ha estado tan protegida como ahora, tres leyes estatales así la avalan: la Ley 10/1991 sobre “potestades administrativas en materia de espectáculos taurinos”, la Ley 18/2013, para la regulación de la Tauromaquia como patrimonio cultural inmaterial, y la Ley 10/2015 para la salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial español, dentro del que figura, lógicamente, la Tauromaquia.

18.- La Tauromaquia no ejerce influencia negativa en los niños

La Tauromaquia no genera ningún trauma infantil, como propagan los antitaurinos, pues no existe ningún estudio serio y robusto, que demuestre que millones de aficionados lo hayan tenido o lo tengan. Pretenden bajo esta falsa excusa cortar su relevo generacional.

19.- La Tauromaquia tiene un gran seguimiento en España

El arraigo por el amor a la Tauromaquia en España es de tal magnitud que, en muchas poblaciones, las fiestas patronales, mitad paganas mitad religiosas, no se conciben sin espectáculos taurinos y sus diferentes variantes.

20.- La tauromaquia no recibe ayudas del Estado

Los animalistas gritan en sus manifestaciones: “con mi dinero, no”. Habría que advertirles que la Tauromaquia (apenas) recibe subvenciones públicas, más al contrario, el Estado ingresa unos 150 millones de IVA por la Fiesta. En los últimos años, en los Presupuestos Generales del Estado, tan solo han figurado 65.000 €: 35.000 € para la Fundación del Toro de Lidia y 30.000 € para el Premio Nacional de Tauromaquia.

Conclusión
La Tauromaquia es grandeza

¿Qué tendrá la Tauromaquia que después de tantos años, de tantas prohibiciones fallidas, de tantos ataques, de tantos bulos, de tanto repudio, sigue estando entre nosotros? ¿Será por su inmensa grandeza?

Libro editado por la Asociación Es de Toros, la que anunció también la creación de una web en defensa de la tauromaquia bajo todas sus vertientes.

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